Will Rodríguez: marzo 2016

martes, marzo 29, 2016

Un libro adictivo, inteligente y encantador

Los personajes que dan vida a este libro son fantásticos en toda la extensión de la palabra: mosquitos transmisores del sida, dinosaurios del mañana, astronautas y crononautas, migrantes interplanetarios, bacterias mañosas, robots y otros seres biomecánicos; caníbales, licántropos y bestias posibles e imposibles; héroes y antihéroes de la historia de México y el mundo, y de otros mundos… Personajes todos del pasado y el futuro, nunca del presente, o al menos no del nuestro. Escenarios para el fin del  mundo (Col. Hotel de las Letras, Ed. Océano, 2015), de Bernardo Fernández, Bef, irrumpe en la ciencia ficción internacional posicionando a nuestro país en un género literario y cinematográfico atribuido, por lo general, a los países desarrollados.
Esta irrupción por demás motivadora es posible gracias a los cuentos que Bef ha creado a lo largo de su trayectoria, por lo que este volumen antológico simplemente nos confirma la enorme calidad narrativa y la fascinación por sus planetas asombrosos. Resulta impresionante la claridad y credibilidad con que estas historias son ubicadas, por ejemplo, en México, valiéndose de personajes de fuerte personalidad y variada condición. Lo mismo el lector reconoce y se identifica con un campesino oaxaqueño que migra a otro planeta, obligado por la probreza eterna que todos conocemos, que con un magnate mexicano de apellido extranjero, el hombre más poderoso del sistema solar, dedicado a enriquecerse a través de la conquista de otros mundos.
Como antesala del disfrute y el horror de estos Escenarios, hay un preámbulo con siete posibles acaboses y un final-final:
  1. El efecto invernadero provoca que el planeta reciba directamente los rayos solares; la comida escasea y los humanos nos convertimos en caníbales.
  2. La mutación del virus del Sida lo hace más expansivo y letal, sobre todo cuando los mosquitos se vuelven transmisores.
  3. Un meteorito choca contra la Tierra y la raza humana se extingue para dar inicio a una nueva era de dinosaurios.
  4. Terremotos y maremotos aniquilan grandes territorios habitados, pero emergen las antiguas ciudades sumergidas. Entonces inicia una nueva Edad de Piedra.
  5. El derretimiento de los polos pudre toda el agua del planeta, convirtiéndola en una sopa putrefacta y virulenta.
  6. Conflagración mundial. Todos los países en guerra. Seis astronautas ven arder el planeta desde la estación espacial Mir.
  7. Parásitos extraterrestres nos invaden, alimentándose primero de los seres vivos del planeta y, después, de todo plástico, metal y concreto.
  8. “El sol se convierte en una supernova. La Tierra muere aullando.”
La primera parte del libro consta de seis historias. En Las últimas horas de los últimos días nos cuestionamos qué tan tan motivador puede ser un futuro exitoso –o denigrante– si no nos asegura que seremos testigos del fin del mundo… ¿Preferimos formar parte del rutinario engranaje de la humanidad, o morir junto con ella y el planeta? Al menos yo prefiero lo segundo (y seguramente Bef también)... Extraterrestres y vampiros Están entre nosotros, conviven biomimetizados con los humanos con la finalidad de lograr su hegemonía… La Ciudad de México se hunde cada vez más y la sociedad permenece en conflicto y decadencia y una política de Cero toleranciaWonderama nos transporta de manera engañosa a la década de los 70, donde un hombre es mantenido preso de sus recuerdos en un penal virtual y atacado por virus cibernéticos… La sangre derramada por nuestros héroes, escrito en colaboración con Gerardo Sifuentes, aborda lo que sería del mundo si Alemania hubiera ganado la II Guerra Mundial, así como el caso de un moderno doctor Mengelle encargado de exterminar a los no arios…
En la segunda parte del libro encontramos Las entrañas elásticas del conquistador: una especie de Donald Trump del futuro, sólo que mexicano de ascendencia japonesa, que con su empresa HumaCorp pretende conquistar todos los planetas posibles, asesinando a sus pobladores… Nuestro planeta Madretierra es habitado por robots y seres de Carne y metal que reniegan el origen de su existencia, pues ser descendiente de seres humanos resulta algo bastante vergonzoso… Bajo un cielo ajeno trata de magistral manera la vida de un migrante oaxaqueño en Marte y las añoranzas del pueblo al que jamás retornará... Crononáuticas, única minificción de este apartado, describe una estación de servicio en la que los navegantes del tiempo pueden tomar los tragos y recordar el futuro… La virgen ahogada conoce al monstruo de Frankenstein es una fantasía posmoderna donde virgen y monstruo viven un romance… El llanto de los niños muertos, con gran belleza narrativa, representa la batalla interna de una mujer que sobrevive a los traumas de su infancia y la condición licántropa resultante de una salvaje relación incestuosa… La capital del país está infestada de Leones, por lo que los chilangos viven escondiéndose de ellos mientras planean cómo recuperar su ciudad.
Como epílogo, Bef nos regala El advenimiento del nuevo esplendor, un cuento de irónica ternura el el que un ángel baja del cielo para anunciar el fin del mundo, pero la apatía de la sociedad actual lo convierte en indigente; o bien, acaso siempre fue un homeless con sueños divinos. Antes de cerrar el libro encontramos un Post-scriptum que el autor utiliza para contar algo acerca de su trayectoria y su relación con la ciencia ficción y la fantasía.
Escenarios para el fin del mundo es un libro adictivo, artificialmente inteligente y, sobre todo, encantador. Estoy seguro que será una referencia ineludible para el estudio y la divulgación de la literatura fantástica de México y de otros mundos. Muchas felicidades a Bef y a la Editorial Océano por este batazo fulminante.


Bernardo Fernández, Bef (Ciudad de México, 1972) es narrador e ilustrador, considerado uno de los pocos escritores slipstream mexicanos. Ha publicado la novela gráfica Uncle Bill, la antología Los viajeros y los libros de relatos ¡Bzzzzzzzzt! y El llanto de los niños muertos. Es autor también de las novelas Gel azul, Ladrón de sueños, Ojos de lagarto y Bajo la máscara, además de la serie que comprende Tiempo de alacranes, Hielo negro y Cuello blanco. Su narrativa le ha valido premios como el Nacional de Novela “Otra vuelta de tuerca” y el Memorial Silverio Cañada de la Semana Negra de Gijón. Su obra ha sido traducida al inglés, francés, alemán, holandés y chino.